La moral social: un camino para la eternidad.
Por
José Raúl Ramírez V.
La liturgia de la palabra de este domingo nos invita a reflexionar sobre la moral
social, un aspecto esencial para la vida cristiana. En el ámbito eclesial se
distinguen tres dimensiones de la moral.
La moral sexual vida se refiere a la vivencia responsable y ética de la sexualidad. En este ámbito, la Iglesia promueve valores como la fidelidad entre un hombre y una mujer, el respeto por la vida humana desde el momento de la concepción, la atención digna a quienes atraviesan momentos de fragilidad, como la enfermedad. No se propone la eutanasia como respuesta al sufrimiento, sino el acompañamiento compasivo y la defensa de la dignidad de la persona hasta el final.